Esta es una declaración conjunta de ILGA Mundo, ILGA Asia, y 6 Rang (Iranian Lesbian and Transgender Network)
"Estamos indignadas por la inhumana decisión de Irán de condenar a muerte a dos defensoras de los derechos humanos de las personas LGBTI", han declarado las Cosecretarias Generales de ILGA Mundo, Luz Elena Aranda y Tuisina Ymania Brown. "Instamos a la comunidad internacional a condenar la brutalidad de este castigo en los términos más inequívocos, y hacemos un llamamiento a las Naciones Unidas y a todos los organismos internacionales para que hagan todo lo que esté en su mano, con todo el alcance del derecho internacional, para impedir esta atrocidad. La sentencia debe ser anulada. Sareh y Elham deben ser liberadas".
A finales de agosto de 2022, el Tribunal Revolucionario de Urumieh, en la provincia iraní de Azerbaiyán Occidental, condenó a ambos a la pena de muerte bajo el cargo de "corrupción en la Tierra", dejando a sus abogados 20 días para apelar la decisión. Como señala el informe de ILGA Mundo sobre la Homofobia de Estado, la vaga disposición de "corrupción en la Tierra" no contiene ninguna referencia explícita a la orientación sexual, la identidad y la expresión de género o las características sexuales, pero no obstante se ha utilizado en el pasado contra personas LGBTI.
Tras el clamor internacional por la noticia, la agencia de noticias de la judicatura iraní declaró que la sentencia era por cargos relacionados con el supuesto tráfico de mujeres a un país vecino.
"Tales acusaciones carecen de fundamento", afirmó Shadi Amin, coordinadora de 6Rang (Iranian Lesbian and Transgender Network). "Las autoridades de la República Islámica tienen un largo historial de inventar cargos contra activistas para justificar los castigos corporales. Está claro para todes nosotres que lo que ha ocurrido no es un proceso debido, y que todos los cargos contra las activistas deben ser retirados".
Las condenas a muerte en Irán se han intensificado en los últimos meses. Los informes indican que las autoridades iraníes han condenado a muerte al menos a 251 personas entre el 1 de enero y el 30 de junio de 2022, en medio de patrones bien documentados de ejecuciones que se llevan a cabo sistemáticamente tras juicios manifiestamente injustos.
Irán se encuentra entre los seis Estados miembros de Naciones Unidas en los que, hasta la fecha, la pena de muerte es el castigo prescrito por ley para los actos sexuales consensuales entre personas del mismo sexo. También hay otros cinco Estados miembros de la ONU en los que ciertas fuentes indican que se podría imponer la pena de muerte por actos sexuales consensuales entre personas del mismo sexo, pero en los que hay menos certeza jurídica al respecto.
En 2017, el Consejo de Derechos Humanos de la ONU emitió una resolución en la que condenaba la imposición de la pena de muerte como sanción para las relaciones consentidas entre personas del mismo sexo (entre otras). La resolución se basa en un informe del Secretario General de Naciones Unidas, António Guterres sobre la cuestión de la pena de muerte, en el que examinó su impacto desproporcionado en diferentes grupos y su uso discriminatorio basado en el género o la orientación sexual.
“Estamos indignadas por la inhumana decisión de Irán de condenar a muerte a dos defensoras de los derechos humanos de las personas LGBTI. Instamos a la comunidad internacional a condenar la brutalidad de este castigo en los términos más inequívocos, y hacemos un llamamiento a las Naciones Unidas y a todos los organismos internacionales para que hagan todo lo que esté en su mano, con todo el alcance del derecho internacional, para impedir esta atrocidad. La sentencia debe ser anulada. Sareh y Elham deben ser liberadas"
Luz Elena Aranda y Tuisina Ymania Brown, Cosecretarias Generales de ILGA Mundo
Zahra Sedighi-Hamadani (Sareh), de 31 años, vivía en Erbil (Irak) y utilizaba una plataforma virtual para hablar de los derechos humanos de las personas LGBTI. En octubre de 2021, fue detenida en Irán cuando intentaba cruzar la frontera para pedir asilo en Turquía. Tuvo que huir después de ser atacada por participar en una entrevista con la BBC Persian y hablar sobre la situación de las personas LGBTI en Erbil. Fue acusada de cruzar la frontera ilegalmente, así como de "promover la homosexualidad", aunque no se han ofrecido pruebas que corroboren las acusaciones. Los informes indican que Sareh fue coaccionada para confesar estos "delitos", potencialmente mediante actos de tortura, incluyendo el confinamiento en solitario y amenazas de quitarle la custodia de sus dos hijos.
Elham Choubdar, de 24 años, es propietaria de una tienda de vestidos de novia y amiga de Sareh, con la que había aparecido en algunas sesiones en directo de Instagram. Tras la detención de Sareh, ocurrió lo mismo con Elham, que fue acusada de fomentar la corrupción y la depravación.
A finales de agosto de 2022, el Tribunal Revolucionario de Urumieh, en la provincia iraní de Azerbaiyán Occidental, condenó a ambas a muerte por "corrupción en la Tierra", dejando a sus abogados sólo 20 días para presentar un recurso.